Nicholas Leister ha
sido creado para amargarme la vida. Alto, ojos azules, pelo negro como
la noche... Suena genial ¿verdad? Pues no tanto cuando te enteras de que
va a ser tu hermanastro y además representa todo de lo que has estado
huyendo desde que tienes uso de razón.
Peligro fue lo primero que
me vino a la cabeza cuando lo conocí y descubrí que mantiene una doble
vida oculta de su padre multimillonario.
¿Cómo terminé cayendo en sus redes? Fácil: con esos ojos es capaz de poner tu mundo patas arriba.
Titulo original: Culpa Mía
Titulo en español: Culpa Mía
Autora: Mercedes Ron
Editorial/Sello: Montena
Páginas: 448
Cuando ví que volvía a salir un libro sobre hermanastros dije "¡bien!" y al segundo siguiente fue como..."mmm no. Mal". Me explico: últimamente no paran de salir libros con esta idea (¡eh! no es una queja), y el último libro que leí con una trama similar fue Querido Hermanastro, y me gustó mucho. Así que solo podía pasar dos cosas: que Culpa Mía matase mi idea mental sobre tramas con hermanastros o bien, que la siguiese alimentando. Y pese a que empecé el libro con ganas pero un poco escéptica a la vez, consiguió conquistarme.
La sinopsis suena muy típica, así que os la resumiré rápidamente: Noah se muda junto con su madre a casa de su nuevo padrastro (que es millorario, por cierto), y allí conocerá a Nick, su nuevo hermanastro. Él es el típico malote que está muy bueno pero que resulta que después no es tan malote como parecía. Fin.
Con esto que os he contado tiene pinta de ser la típica historia a la que ya estamos más que acostumbrados, aun así la autora consigue meter detalles y acción en todo momento, lo que la convierte en una historia adictiva y muy entretenida.
Los personajes no están mal, aunque Noah conseguía ponerme un poco nerviosa en algunas ocasiones. Hacía cosas irracionales que no encajaban mucho con lo que se supone que es (o actúa) su personaje.
Además de esta historia de amor-odio entre los protagonistas también hay otras subtramas que me parecieron muy interesantes. Sobre todo en la manera que están llevadas (aunque no os las voy a contar para no destriparos el libro).
El ritmo es muy ágil. Tiene toques de romance (obviamente), pero también de intriga. A pesar de ser una trilogía el primer libro (a mi parecer) acaba perfectamente como uno autoconclusivo sin necesidad de marear las cosas en el futuro (y de poder cargarla). Aun así estoy deseando leer la segunda parte, Culpa Tuya (que sale en septiembre), aunque espero que no se haga muy pesado ni se alargue mucho la historia, porque sinceramente no sé por dónde puede salir la autora (punto a su favor).
En definitiva, me parece un libro perfecto para esta época: ágil y con enganche pero sin demasiadas complicaciones. Un libro que se puede leer de una sentada en una tarde de verano.